Toma 11

Un juego de decisiones y riesgo que pone a prueba la gestión de la mano y la anticipación de los rivales. En Toma 11 cada persona recibe diez cartas que deberá jugar con cuidado sobre las pilas de cabezas de toro; la clave está en que la diferencia entre la carta jugada y la superior de la pila no supere los diez puntos, porque si no se cumple esa regla se aplica la penalización conocida como «Toma 11» y el jugador aumenta el número de cartas en su mano. Las partidas se resuelven con rapidez pero ofrecen constantes dilemas tácticos, donde el objetivo final es terminar con la menor puntuación posible.

Diseñado por Wolfgang Kramer, este título es una variante independiente basada en el clásico y entretenido «Toma 6», que conserva su espíritu competitivo y lo adapta a una dinámica diferente. Su sencillez de reglas lo hace accesible para grupos familiares y jugadores casuales, mientras que la profundidad estratégica asegura partidas reñidas para quienes buscan optimizar cada jugada.