Con una mirada incisiva sobre lo cotidiano y los deslices de la convivencia, la novela presenta a la familia Popper —judíos franceses de origen húngaro— y su convivencia marcada por tensiones y desencuentros. En Serge la narración, en boca de Jean, reconstruye los vínculos fraternales que persisten a pesar de fracasos sentimentales y rencores latentes; la obra está firmada por Yasmina Reza, cuyo tono combina sarcasmo, cercanía humana y un humor negro que no evita la ternura.
La trama se articula en torno a tres hermanos —Serge, Nana y Jean— y dos escenas que enmarcan la experiencia vital: el fallecimiento de la madre y la última palabra que pronuncia, y una posterior visita a Auschwitz, presentada como lugar de memoria que convive con la banalidad del turismo de selfies. La novela refleja, con agudeza y sin concesiones, los absurdos del siglo XXI y la complejidad de las relaciones familiares, mostrando personajes a la vez ridículos y conmovedores.
Lejos de la sentimentalidad fácil, la autora despliega una disección fina de comportamientos y diálogos punzantes que evocan tanto la comedia como la tragedia. Esta tragicomedia sobre la familia y el paso del tiempo evidencia el dominio narrativo de Reza: ironía precisa, observación moral y una empatía sutil que convierte en humano incluso lo más excéntrico de sus personajes.