Él lleva una vida de pecado y ella una de virtud. Sean Bell no es un buen hombre y nunca lo ha pretendido. No cree en la bondad ni en Dios. Es un playboy. Cuando conoce a una hermosa universitaria en una fiesta benéfica, no duda en decirle lo que le haría, hasta que descubre que es la hermana de su mejor amigo, Zenny, quien está por convertirse en monja. Ella quiere asegurarse de su decisión y le pide a Sean que le muestre las tentaciones que deja atrás. ¿Zenny lo eligirá a él o a su Dios?
Segundo libro de la trilogía Padre. Novela super spicy y con contenido explícito, ideal para amantes del dark romance.