Con una mirada alada que merodea la ciudad, Pájaros desde mi ventana reúne poemas que exploran la textura de las aves y la materialidad de sus trinos, narrando tanto la presencia cotidiana como la sensación de que muchas especies han sido desplazadas o se han vuelto equivalentes urbanos de los drones nocturnos. La obra funciona como una bitácora de escritura: registro atento, anatomía del gesto poético y una zona de observación en la que el arte se manifiesta como un organismo vivo.
Aquí emergen haikús exquisitos y poemas furibundos, urdidos con un tono firme y singular que resalta en nuestro panorama poético; son piezas que invitan a la relectura y que confirman la constante exploración formal y temática de su autora, materializada en una escritura que sabe alternar precisión y desgarro. Firmada por Elvira Hernández, esta colección deja en evidencia la afinidad del lenguaje por lo vivo y lo instintivo, donde las raras avis terminan siendo las voces que volvemos a leer.