En América Latina la violencia asociada al tráfico de drogas dejó de ocultarse para convertirse en un espectáculo público donde los fuegos artificiales, los ritos mortuorios, los disparos al aire y la ostentación de lujos definen el lenguaje del poder. En Narcocultura, Ainhoa Vásquez ofrece un ensayo riguroso que explica cómo este ecosistema criminal se presenta como una alternativa identitaria para niños y jóvenes marginados, proponiendo una existencia breve pero visible y marcada por la pertenencia a un colectivo viril.
La autora vincula con agudeza la masculinidad, la juventud y las dinámicas del capitalismo para mostrar por qué el narcotráfico no es solo un fenómeno delincuencial sino también cultural: una exhibición performativa de autoridad que atrae identidades precarias mediante promesas de dinero, respaldo fraternal y reconocimiento. El libro combina observación crítica y lectura sociocultural para desentrañar las prácticas, símbolos y narrativas que sostienen la narcocultura, ofreciendo herramientas conceptuales para comprender su impacto en la trama social contemporánea.