Alejandro crece entre chimeneas y turnos, destinado como la mayoría a trabajar en las fábricas cuando sea mayor. En Melodía en la ciudad, la llegada de una caravana de un circo gitano rompe la rutina y despierta en el protagonista una nueva sensibilidad; la narración de Benjamin Lacombe captura con delicadeza el instante en que Alejandro escucha por primera vez las alegres melodías que trastocan su paisaje cotidiano.
El libro explora el contraste entre lo industrial y lo mágico, mostrando cómo la música puede abrir horizontes y encender la imaginación. Con un tono poético y emotivo, la historia sigue la transformación interior del joven protagonista y plantea una reflexión sobre el poder de las pequeñas maravillas para alterar el rumbo de una vida.