Con ingenio y ternura, este relato plantea que los prejuicios pueden jugar malas pasadas: en Los yetis son lo peor acompañamos al duende Gilbert en una confesión sincera y divertida, donde admite que los unicornios organizan las mejores meriendas y que los dragones preparan una sopa de helado excepcional, mientras mantiene una convicción categórica que pone en jaque su propia experiencia; como él mismo exclama «¡LOS YETIS SON LO, ABSOLUTAMENTE, PEOR!».
Con un ritmo ágil y situaciones llenas de imaginación, Gilbert decide comprobar su teoría y emprende la búsqueda de un yeti, lo que desata encuentros que cuestionan sus certezas y provocan risas. La voz de Alex Willian combina humor y ternura para ofrecer una lectura entretenida que estimula la curiosidad y muestra cómo el error puede convertirse en una valiosa lección.