La intriga estalla en una mañana de junio cuando en la plaza A. Quintana aparece el cadáver desnudo de una joven; según el extraño relato de una testigo, el cuerpo había caído desde lo alto. En Llovida del cielo la aparente evidencia convive con pistas engañosas y un humor afilado que convierte la investigación en una radiografía mordaz de la vida en Santiago de Compostela.
El escéptico comisario Salorio se enfrenta a una pesquisa que lo obliga a indagar en círculos poderosos de la Iglesia tras la desaparición del Codex Calistino, la joya del patrimonio de la catedral; la novela combina sarcasmo y tensión, desplegando guiños del mejor género negro y un tejido narrativo lleno de sorpresas. Esta obra, firmada por Alfredo Conde, presenta una prosa elegante y una estructura que atrapa al lector sin renunciar al ingenio y la ironía.