En un tiempo marcado por la fragilidad social y personal, la pregunta ¿Por qué leer y escribir libros en un mundo a punto de quebrarse? atraviesa cada página de La vida privada de los árboles. Esta novela confirma a Alejandro Zambra como una voz central de las nuevas generaciones: una escritura que combina precisión y ternura para explorar la intimidad, la memoria y las formas en que las historias personales resisten las fracturas del entorno.
En la nueva edición, el epílogo de Margarita García Robayo aporta una lectura reveladora y personal; «nos plantea una línea argumental delgada y breve, detrás de la cual se pueden visualizar ramificaciones espesas como en un espejismo de bosques»: así describe el modo en que el relato abre paisajes y capas de sentido. Esa reflexión acompaña a este «pequeño libro enorme», texto conciso en superficie y prodigioso en sus resonancias, que invita a reparar en los detalles y en la fuerza silenciosa de lo cotidiano.