La niña polaca

En agosto de 1939, cuando los acuerdos entre la Unión Soviética y la Alemania nazi reconfiguraban las fronteras de Europa, la novela La niña polaca nos introduce en la vida de Ania, una joven que aún juega en el campo y que pronto es arrancada de su inocencia por la ocupación de Komarno, para terminar en el inmenso y despiadado universo del Gulag siberiano. Escrito por Mónica Rojas, este relato combina rigor histórico y profunda sensibilidad para retratar cómo la violencia estatal fractura destinos y obliga a reconstruir la esperanza a partir de afectos y recuerdos.

A través de una prosa que alterna la crudeza del trabajo forzado y el frío inclemente con la ternura de los lazos familiares, la novela sigue a Ania y su familia en su lucha cotidiana por la supervivencia, aferrándose a la memoria de Cezlaw, a las historias de la anciana Olga y a la devoción de sus padres. La extenuante migración posterior y la llegada a la Hacienda de Santa Rosa en Guanajuato, México, se narran con una sobriedad emotiva que revela la reconstrucción de identidades, la búsqueda de redención y la capacidad humana para encontrar una nueva patria sin renunciar al pasado.