En plena crisis de pareja, un retratista de cierto prestigio abandona Tokio y acepta refugiarse en la solitaria casa de un pintor famoso; en ese contexto de aislamiento y memoria, La muerte del comendador [Libro 1] se presenta como una novela que mezcla intriga psicológica, reflexiones sobre el arte y atmósferas oníricas.
Al visitar un desván, el protagonista descubre un cuadro envuelto con una etiqueta que reza «La muerte del comendador [Libro 1]», un hallazgo que desencadena una trama poblada por la ópera Don Giovanni de Mozart, el encargo de un retrato, la presencia de una adolescente tímida y la figura enigmática del comendador; la voz narrativa de Haruki Murakami combina prosa precisa con pasajes de misterio y simbolismo, articulando una exploración de la memoria, la identidad y la creación artística que persiste después de cerrar la última página.