La periodista más popular de Gernika es encontrada fijada a la vía, con un delicado tulipán rojo entre sus manos y una escena retransmitida en directo que convoca el suspense desde la primera página. En La danza de los tulipanes, Ibon Martín trenza una investigación policial con el paisaje único de Urdaibai, donde el mar y la tierra dictan ritmos y esconden secretos.
La trama presenta a un asesino meticuloso cuya violencia coreografiada contrasta con la serenidad de la comarca; la prosa apuesta por la precisión periodística y un pulso narrativo que descubre capas psicológicas y motivaciones ocultas. Tensión sostenida, atmósferas evocadoras y personajes complejos confluyen en una novela que examina la relación entre naturaleza, violencia y el poder perturbador del espectáculo mediático.