Publicada en 1926 y ambientada en la Europa de entreguerras, Fiesta captura con precisión su característico estilo lacónico la experiencia de la llamada «generación perdida». La novela de Ernest Hemingway sigue a un grupo de expatriados en París y Pamplona, donde la pasión por la fiesta taurina y las complicadas relaciones personales configuran un tejido narrativo de tensión contenida y belleza sobria.
Con frases depuradas y escenas descritas con economía visual, Fiesta explora la identidad, el duelo y la búsqueda de sentido tras la guerra, apoyándose en imágenes potentes y en un diálogo que sugiere más de lo que explica. La alternancia entre humor seco y melancolía, junto con una estructura que privilegia la escena y el ritmo, convierte esta obra en un estudio profundo sobre el deseo, la soledad y las contradicciones de una época en transformación.