Ganadora del Premio Pulitzer (2011) y elegida entre los mejores libros de la década por la revista Time, la novela El tiempo es un canalla de Jennifer Egan reúne trece relatos entrelazados que siguen la vida de Bennie Salazar, antiguo rockero punk convertido en ejecutivo discográfico, y de Sasha, su asistente apasionada y conflictiva, ofreciendo una perspectiva generacional rica en matices y contradicciones.
Con la música como latido constante, Egan explora las consecuencias del paso del tiempo y la irrupción tecnológica en las relaciones personales, trazando un fresco que abarca desde la contracultura de San Francisco en los setenta hasta el desencanto de los noventa y la incertidumbre posterior al 11S; cada capítulo funciona como una pieza que revela cómo las decisiones, las pérdidas y las pequeñas caídas configuran trayectorias vitales complejas, con una prosa que combina intensidad emocional y aguda observación social.