El príncipe Hiroshi debe ser protegido. Rio, el probador real, se asegura de que la comida esté buena. Hiroshi no quiere arriesgarse para nada, y Rio hace todo antes que él: el baño, los juegos, el estudio... Sus padres no están del todo de acuerdo, pero Hiroshi hace berrinches y ellos ceden a su capricho. Un día, la guerra llega al reino. ¿Quién comandará la defensa y a su pueblo? Una hermosa historia ambientada en el antiguo Japón, que habla sobre la amistad, el honor, la valentía y el amor.
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