Ambientada en la frontera entre México y Estados Unidos durante el siglo XIX, El hombre examina el nacimiento de las grandes fortunas y el precio humano que exigieron. La novela de Guillermo Arriaga reconstruye una geografía de disputas territoriales, despojo indígena y esclavitud africana, mostrando cómo el poder se consolida a fuerza de violencia, estrategias matrimoniales y alianzas económicas.
En el centro aparece Henry Lloyd, hijo de un trampero que asciende hasta convertirse en la mano derecha del terrateniente, casarse con su hija y apropiarse de su fortuna, pero su figura se perfila a través de cinco voces que nunca le pertenecen: un joven prófugo que compartió con él la infancia marcada por la violencia; la esposa, heredera del latifundio; dos esclavos que trabajaron bajo su mando; y un tataranieto contemporáneo, ejecutivo en Nueva York cuyas empresas cotizan en Wall Street y cuya riqueza arrastra la sangre de los explotados.
Con resonancias de western y novela histórica, la narración alterna perspectivas para revelar cómo las decisiones individuales se entrelazan con procesos sociales de apropiación y olvido, y cómo los legados del siglo XIX persisten en los circuitos financieros actuales. El tejido narrativo privilegia las voces subalternas y ofrece una mirada crítica sobre la acumulación de capital y la memoria colectiva, invitando a reflexionar sobre las continuidades entre violencia, riqueza y poder.