Esta propuesta lúdica invita a los más pequeños a explorar y sorprenderse mientras buscan al protagonista en cada página. En Creo que vi un... ¡León! los lectores mueven deslizadores para descubrir escondites inesperados, transformando la lectura en una experiencia táctil y visual que fomenta la curiosidad y la concentración.
Con texto directo y mecánicas sencillas, el libro plantea la premisa «Hay un león escondido en algún lugar dentro de este libro... ¡Vamos a buscarlo!», y su narración provoca preguntas como «¿Estará debajo de la mesa? ¿O quizá en la biblioteca?», lo que estimula la observación y la motricidad fina. Firmado por Lydia Nichols, pertenece a la colección Creo que vi un..., una propuesta pensada para introducir a los niños en la exploración activa del libro-juego.