La madurez de una relación se mide en las decisiones cotidianas y en las conversaciones pendientes. En Heartstopper 4 la pareja formada por Charlie y Nick profundiza su vínculo: Charlie cree estar listo para declararle su amor, y Nick también lo siente, aunque su mente está ocupada con asuntos personales que dificultan entregarse por completo.
Alice Oseman propone en este cuarto libro de la saga una narración cargada de sensibilidad y honestidad, donde coexisten el descubrimiento personal y las tensiones familiares. Nick enfrenta la posibilidad de salir del clóset con su padre y sus propias dudas, mientras surge la inquietud de que Charlie podría estar atravesando un desorden alimenticio; cuando el verano se torna otoño y comienza un nuevo año escolar, ambos jóvenes deberán aprender «lo que significa realmente amar», en una historia que aborda identidad, salud emocional y afectos con delicadeza y realismo.